La líder de la Oposición en Cataluña alerta que Sánchez no quiere ‘la operación diálogo’, “quiere la operación dar la espalda” ya que “necesita al separatismo para seguir en la Moncloa”

Parlament de Cataluña, lunes 9 de julio de 2018. “Hoy Sánchez no se ha reunido con Cataluña; se ha reunido con el separatismo que excluye a millones de catalanes”. Así lo ha dicho la líder de la Oposición en Cataluña y portavoz nacional de Ciudadanos (Cs), Inés Arrimadas, después de la rueda de prensa de la vicepresidenta del Gobierno de España, Carmen Calvo, que ha valorado la reunión del presidente de la Generalitat, Quim Torra, con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, que considera que “sigue confundiendo Cataluña con el separatismo” porque no se da cuenta que en Cataluña hay una mayoría social no independentista “a la que Torra no representa”. Por eso, ha lamentado que “los grandes ausentes en el encuentro han sido los catalanes no independentistas” puesto que Sánchez no quiere ‘la operación diálogo’, como asegura, sino que quiere la operación “mirar hacia otro lado” porque “necesita al separatismo para seguir en la Moncloa”.

En una rueda de prensa en la cámara catalana, Arrimadas ha rechazado la “sensación de normalidad respecto a todo el que hace la Generalitat” después de que Sánchez no haya hecho ninguna pregunta a Torra “sobre los símbolos que excluyen a los catalanes y que están en las instituciones catalanas, sobre la reafirmación en la unilateralidad que aprobó el Parlamento, sobre abrir de nuevo las embajadas o sobre el veto al Rey”. En este sentido, ha asegurado que el presidente de la Generalitat “está tranquilo porque puede seguir haciendo lo que quiera puesto que Sánchez mirará hacia otro lado”, después de que hoy lo hayan recibido “cómo si nada” una semana después de que se haya aprobado la moción de la CUP sobre la vía unilateral.

“Hoy se han reunido dos socios de investidura, Sánchez ha elegido como socios a aquellos que quieren romper España”, ha añadido después de alertar que el presidente de la Generalitat ha ido a la Moncloa “como cobrador del lazo” puesto que “ni ha hablado de mejorar el sistema de financiación, ni de las inversiones que necesita Cataluña, ni de sanidad, educación o dependencia” porque “sólo quiere, sabe y puede hablar del monotema”. Por otro lado, ha manifestado después de la reunión que “volvemos al inicio del ‘procés’” y ha advertido que el proyecto del Govern “ya no es independentismo, es una obsesión procesista”.