Beltrán: “Queremos que el Govern impulse la diada Sant Jordi para que sea declarado patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO”
La diputada de Cs, Blanca Navarro, defiende medidas para que las personas afectadas de TEA puedan participar en ferias y fiestas populares
Parlament de Cataluña, miércoles 17 de julio de 2019. “Queremos que el Govern impulse la diada Sant Jordi para que sea declarado patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO”. Así lo ha dicho la diputada de Ciudadanos (Cs) en el Parlament, Susana Beltrán, al defender una propuesta de resolución aprobada en la comisión de Cultura para que el Parlament inste al Govern de la Generalitat a potenciar las iniciativas necesarias para que la diada Sant Jordi sea declarada patrimonio cultural inmaterial de la humanidad por la UNESCO.
La diputada ha explicado que la iniciativa pide que el Govern “haga una campaña de apoyo y publicidad para redoblar esfuerzos ante la UNESCO” y ha defendido que la diada consiga esa denominación por “sus valores universales que unen a la sociedad catalana”. Beltrán ha recordado que en la pasada legislatura ya se aprobó una propuesta del partido naranja en el mismo sentido y ha apuntado que “es responsabilidad del Govern presentar un presupuesto para hacer la campaña y no lo ha hecho”.
También en la comisión de cultura, se ha aprobado otra propuesta de resolución de Cs con medidas para facilitar la participación de personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) en ferias y fiestas populares. La diputada naranja, Blanca Navarro, ha argumentado que “si realmente queremos tener una sociedad inclusiva donde haya sitio para la diversidad, es necesario que la sociedad permita que la diversidad tenga cabida”.
La propuesta busca una mayor implicación de organismos locales y supramunicipales, como ya se han aplicado en otras Comunidades Autónomas “con resultados satisfactorios”, para hacer las fiestas populares más amigables para personas afectadas de TEA. Navarro ha explicado que, por ejemplo, se puede reservar unas horas determinadas para que las ferias estén libres de estímulos acústicos, uno de los elementos que genera más sensibilidad entre los afectados de TEA.