La diputada Sonia Sierra asegura que “es muy grave la querencia que tiene TV3 a invitar a personas que lanzan serias acusaciones contra la Guardia Civil o a condenados por terrorismo”.

Parlament de Catalunya, viernes 19 de junio de 2020. “Los catalanes no se merecen que TV3 idealice a Jordi Pujol como líder espiritual cuando es un evasor fiscal confeso”. Así se ha expresado el diputado de Ciudadanos (Cs) en el Parlament, Nacho Martín Blanco, durante la comisión de control a la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA), en la que ha criticado que “se ha hecho un panegírico en el programa FAQS de TV3 a alguien que, desde el punto de vista moral, no es un ejemplo, toda una serie de programas han alabado la figura de Pujol sin veracidad ni contraste, algo más propio de regímenes teocráticos”.

Por su parte, la diputada Sonia Sierra ha aludido a la presencia de Jaume Roures en el programa FAQS de TV3 para hablar de la Guardia Civil asegurando que “después de toda la polémica en torno al documental ‘El cas Rosell’, a Roures no se le hizo ninguna pregunta al respecto”. Sierra ha insistido en que “aunque no lo parezca, TV3 es una televisión pública, de ahí que sea muy grave la querencia que tiene la cadena a invitar a personas como Roures, que no paran de lanzar serias acusaciones contra la Guardia Civil, o a personas que han sido condenadas por terrorismo”.

En esta línea, Martín Blanco se ha referido a la entrevista que FAQS hizo a Peio Alcantarilla, condenado por colaborador con banda terrorista: “¿Son estos los medios públicos que quieren para Cataluña?” ha preguntado el diputado naranja al director de TV3, Vicent Sanchis. “A Alcantarilla se le entrevistó con exquisita amabilidad, por eso criticamos que en una televisión pública, que pagamos entre todos, los terroristas se sientan como en casa”, ha apostillado.

Por último, la diputada Blanca Navarro se ha referido al elevado coste de las corresponsalías de TV3 en el extranjero, “más de seis millones de euros sólo en 2019”. Navarro ha criticado que “TV3 gasta millones contratando a sus amigos, como los de la empresa de servicios COMSA, por eso es fácil entender que sea la tele pública más cara de España y por eso el presupuesto debería ser reducido a la mitad, sobre todo ahora que la prioridad debe ser salvar vidas y salvar empleos”.