Ciutadans exige control parlamentario de los altos cargos del Govern colocados a dedo, sobrepagados y con licencia para saltarse la ley
• La portavoz de CS, Anna Grau, reivindica para CS el mérito de haber denunciado a Buch y acusa a Elena de actuar como si el Parlament fuese un narcopiso
Barcelona, jueves 29 de junio de 2023.- El Grupo Parlamentario de Ciutadans (CS) en el Parlament de Catalunya ha presentado una moción para rechazar la política de nombramientos y las retribuciones de los altos cargos de la Generalitat de Catalunya. En su intervención ante el plenario, la portavoz de CS, Anna Grau, ha puesto de relieve el gran número de altos cargos designados por el Govern de la Generalitat, así como el poco control existente por lo que ha exigido un mayor control parlamentario sobre estos para poner fin al despilfarro y la permisividad que disponen para poder saltarse la ley.
La diputada liberal ha exigido “poner coto al exceso de altos cargos nombrados a dedo, retribuidos faraónicamente y sin someterse al más elemental control parlamentario” denunciando que “no es fácil enfrentarse al mastodonte de la violencia institucional y económica que llevan años amasando”. Anna Grau, ha insistido que hay que “poner orden en la actual dispersión de las remuneraciones de los altos cargos y del personal de confianza de los entes dependientes de la Generalitat”, reclamando que ningún alto cargo pueda tener una remuneración superior que la del propio Conseller/a. En este sentido, la portavoz naranja no ha ahorrado críticas al Conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, al que ha reprochado “su sueldazo” y al que ha calificado de “bien pagado”, recordándole que “ha intentado convencer a la gente que es normal vivir al lado de edificios okupados por delincuentes muy violentos y no actuar” exigiéndole que “se gane el sueldo y defienda a los vecinos”. Anna Grau ha aprovechado su discurso para recordar el rifirrafe que mantuvieron ambos ayer en el que Elena aseguró que el Parlament no era un bar, acusando la diputada liberal al Conseller de “actuar como si fuera un narcopiso”.
Anna Grau también se ha referido, en su defensa de la propuesta de CS, al exconseller de Interior Miquel Buch “un caso de ascenso social meteórico”, y a quien ha reprochado que “hacía de todo menos garantizar la seguridad de los catalanes” recalcando que “sin la denuncia que presentó CS, Buch no estaría hoy procesado por recolocar a dedo a un Mosso d’Esquadra como escolta y Community Manager de Puigdemont en Waterloo” pero ha lamentado que se le premió con un nuevo cargo público dependiente de la Generalitat.