El diputado de Cs alerta que esta ley “vulnera el derecho a la intimidad de los ciudadanos” por el “persistente intento del Govern” de construir una base de datos, como anunció Santiago Vidal

“Su ley de acompañamiento se resume en más tasas, más impuestos y más presión fiscal para los catalanes”. Así se lo ha dicho el portavoz de Economía de Ciudadanos (Cs), Antonio Espinosa, a los miembros de la Generalitat en el debate de la Ley de medidas fiscales, administrativas, financieras y del sector público en el pleno del Parlament. Y ha añadido que “contentar a la CUP” va a suponer una subida en sectores como el del agua, la cultura, la protección civil e “incluso para obtener la tarjeta sanitaria”. “El cambio de cromos con los antisistema ha hecho de los Presupuestos un monstruoso Franquestein, con parches que hacen que los catalanes estén entre los españoles que pagan más impuestos”, ha alertado.

Antonio Espinosa ha destacado del apartado de medidas administrativas que “vulnera el derecho a la intimidad de los catalanes por el persistente intento de la Generalitat de construir una base de datos de carácter fiscal”, tal y como apuntaba el ex senador Santiago Vidal en los actos de ERC. Asimismo, ha puesto en evidencia que “no hay ni una sola medida” que tenga que ver con la “racionalización y modernización de la administración para que sea más eficiente”. Y ha criticado las propuestas fiscales del Govern: “Hay que estimular la economía con medidas para que sea más competitiva y para mantener el estado del bienestar”.

Sobre el impuesto a las bebidas azucaradas envasadas, el diputado de Cs ha lamentado que “no es la vía adecuada para modificar hábitos de consumo” ya que, si un ingrediente no es beneficioso para la salud, “no es razonable que solo se grave a uno de los productos que lo contienen”.

En referencia al impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) ha asegurado que la Generalitat pretende “cambiar las reglas del juego a mitad de partido y perjudicar a los 250.000 contribuyentes que compraron su vivienda antes de 2013”, pensando que tendrían una deducción fiscal que ahora les quitan. Además, ha explicado que el impuesto a las viviendas vacías va a suponer quitar poder tributario a los Ayuntamientos, a los que “se les roba una fuente de ingresos”.